The night when nothing was what it seemed / La noche en que nada fue lo que parecía TCSP Week 128 (eng-esp)

Hello, my friends at Cinnamon Cup Coffee.

Today I'm not here to talk about #coffee, specifically, or a coffee shop, but rather about a very memorable moment, to answer the Prompt of Week 128:
My first date with my wife.

I'll explain in a moment.
Today I'm here to share with you about my memorable first date with my wife at a friend's coffee shop. Except the coffee shop hadn't even opened yet.
We went with her and a mutual friend to help her arrange the furniture and try out some of the new products she had bought.
That was the part that interested me, since I like trying new things, like new coffee brands ☕.
However, their idea was different. It was to have a tea party.

They showed us a variety of teas, and since I was the new one in the group, they let me choose. I'm not a big tea connoisseur, but I'd always heard about Earl Grey in movies and TV shows.
So I ordered that, and they made it.

I assure you it was all to please my girlfriend and her friend. I would have preferred coffee; I was expecting coffee, but what was there was tea.
However, seeing the tableware, the rugs on the floor, and all that bohemian, homey, yet very delicate and pretty decor, I decided to give it a try.
After all, I like trying new things, like I told you.

So, that's what we tried. It wasn't a guitar that was played, it was a ukulele. We didn't sweeten with sugar, but with honey.
And we drank Earl Grey tea in what would become a café in the future.
Nothing was what I expected.

However, everything was better that way.
The night was one surprise after another. I opened my mind to other options and found myself enjoying things I never thought I could possibly like.

Excellent tea, excellent music, unbeatable company, and the birth of a relationship that would change my life forever made that night an unforgettable one.

Open your mind to change, to trying new flavors in the cafes you go to, and you won't regret it.
That night in a cafe, which wasn't yet a cafe; I moved chairs and tables but sat on the floor; I went for coffee and tea, I thought I would hear guitar and it was ukulele: I thought I would have a good time, and it was the best night ever.

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Versión en español

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Hola, amigos míos de Cinnamon Cup Coffee.
Hoy no vengo a hablar de #café, precisamente, no de una cafetería precisamente, pero sí de un momento muy memorable, para responder al Prompt de la semana 128:
Mi primera cita en pareja con mi esposa.

Me explico enseguida.
Hoy vengo a compartirles sobre la memorable primera cita con mi esposa en la cafetería de una amiga. Solo que la cafetería aún no se había inaugurado.
Fuimos con ella y un amigo en común para ayudarla a acomodar el mobiliario y probar algunos de los productos nuevos que había comprado.
Esa era la parte que me interesaba, ya que me gusta probar cosas nuevas, como nuevas marcas de café ☕.
Sin embargo, su idea era otra. Era realizar una fiesta del te.

Nos mostró una variedad de tipos de te y, como era el nuevo en el grupo, me dejaron escoger a mí. No soy muy conocedor del te, pero siempre había escuchado hablar del Earl Grey en películas y series.
Así que eso pedí y lo prepararon.

Les aseguro que todo fue por complacer a mi novia y a su amiga. Yo hubiera preferido café, esperaba café, pero lo que había era te.
Sin embargo, al ver la vajilla, las alfombras en el suelo y todo aquel decorado medio bohemio, casero, pero muy delicado y bonito, decidí darle una oportunidad.
A fin de cuentas, me gusta probar cosas nuevas, como les dije.

Así que fue te lo que probamos. No fue guitarra lo que se tocó, fue un ukelele. No endulzamos con azúcar, sino con miel.
Y tomamos te Earl Grey en lo que se convertiría una cafetería en el futuro.
Nada fue lo que esperaba.

Sin embargo, todo fue mejor de ese modo.
La noche fue una sorpresa tras otra. Abrí mi mente a otras opciones y me sorprendí disfrutando de lo que nunca creí posible que me gustara.

Un te excelente, música excelente, compañía inmejorable y el nacimiento de una relación que cambiaría mi vida para siempre, hicieron de esa noche, una noche inolvidable.

Abran su mente al cambio, a probar nuevos sabores en las cafeterías a las que acudan y no se arrepentirán.
Aquella noche en una cafetería, que aún no era una cafetería; moví sillas y mesas pero me senté en el suelo; fui a tomar café y tomé te, creí que escucharía guitarra y fue ukelele: creí que la pasaría bien, y fue la mejor noche de todas.